Cualquier día puede que sea nublado y gris,
pero sabes perfectamente que puedes atravesar la cortina que separa tu mirada
de lo que esconden las nubes y la lluvia, para agarrar con fuerza los rayos de
sol que produjeron en sus inicios la tempestad y hacer acopio de ellos a través
de todos tus sentidos…
Podrás disfrutar, hasta de un paladar
exquisito al degustar el más triste embutido y respirar los aromas más sutiles
aun a pesar de no existir en la gran ciudad…tu piel emanará la tersura del
viento cuando no entorpece tu caminar y lo acelera a favor de lo que quieres,
saldrás jovial a caminar bajo la lluvia para escuchar como roza tu piel y la
empapa de alegría…y no dejarás de ver el sol porque él está a tu lado para
hacerte saber que te está esperando… lo agarres con fuerza y contagies de
alegría al que se acerque a ti.
Hoy un guiño de complicidad tiene que
parecerte un fuerte cerrar de tus ojos plenos de satisfacción, una mano tendida
y lánguida tienes que convertirla en un abrazo fuerte y sincero que sorprenda
al que de tan lasa forma te quiere
saludar,…hoy te has levantado para cambiar el gato por liebre y el alpiste por
el mejor manjar, hoy no puedes dejar pasar ningún tren de mínima felicidad y
debes hacer acopio de él para engullirlo, devorarlo, administrarlo y que dure
eternamente…
Y arranca la luz del estío siempre que te
acompaña la tierna hierba, cuando suturas la tierra con tus pies descalzos,
creando un surco de alegría por la piel que acompaña la dulce canción del roce
de tus talones sobre el suelo húmedo de la mañana,…
Es entonces cuando amaneces de verdad y
puedes sostener con las manos las nubes y agarrarlas tan fuerte que serías
capaz de desgranarlas en cada molécula de hidrógeno y oxígeno que llevan
dentro, porque te ves poseedor de la pasión de la vida.
Y la vida te acompaña a cada paso que das,
haciendo de éstos, firmes y desgarradores para cualquier momento implacable que
quiera frenarlos, porque nada puede frenar las ganas de ti y de lo que te
brinda el mundo cuando está de tu lado.
Rompen los ríos en meandros que se aproximan
a un lado y otro de la tierra, como si quisieran acariciar cada grano de arena,
cada arbusto olvidado, cada canto de un pájaro y cada rumbo del caminante, para
hacer más alegre el camino y más vistoso el sendero que debe y puede alcanzar
con sus pies, llegando a acoger al que mira con pasión los centímetros de vida
que le rodean y lo mucho que le sobra dentro, si quisiera acogerlos y
quedárselos para responder alto a sus latidos ajetreados.
Lanza la mirada alta para gritar con más fuerza
y llega suave el horizonte porque en él está la utopía que permitirá seguir
buscando la mirada sincera y el abrazo honesto de un niño cuando apenas te
conoce, y canta el árbol caduco en otoño porque sabe que de su desnudez poblará
el suelo del necesario sustento para sobrevivir, ruge el valiente a tu lado por
creerte temeroso…, pero sabes que del pasto del árbol nacen las nuevas hojas y
solo de esperar a la primavera crecerás un poco más, mientras la valentía es
efímera e incapaz de resolver la alegría, sabes que de la pasión solo se desata
pasión y empobreces las miradas de los que quieren sentirse bien, obviando que
tus palabras saben más que tu desdén.
Hay que seguir pisando la tierra para allanar
los caminos, sonreír al profano y enseñarle a caminar, hay que mentir sin
restos pues eso no son mentiras, hay que reír sin pausa, hay que nacer y vivir…
Descálzate una
mañana rumbo al sol sin ocultar, que feliz no es el que dice poseer la
felicidad, que feliz es el que siente, feliz es el que sabe amar, feliz es el
que no para de amar su libertad, sin importarle que el mundo este delante o
detrás, sin importarle miradas, sin traicionar su verdad, si haces feliz a
alguien… más feliz te sentirás, si feliz es tu mirada, feliz la recibirán, y
habrá infelices aquí y habrá infelices allá, pero que nadie me diga nunca que
infeliz te noto ya, porque feliz es el que ama…FELIZ ES EL QUE SABE AMAR.
P.D.: Cualquier día, por duro que sea debe
darte la posibilidad de hablar de la “FELICIDAD”, porque de no ser así, siempre
debes estar esperando a mañana y…mañana no existe.
“NO
SABER SENTIR, COMO NO SABER AMAR…ES MEJOR NO SABER”
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Para mi amigo Antonio Cotillas Leirado y su hijo....con todo el cariño.
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